6/30/2014

SOMOS LO QUE COMEMOS

Bienaventurados aquellos que puedan comer de todo, pues los atópicos no disfrutaremos de tal deleite.

Una buena alimentación es fundamental en cualquier persona. Ya sabes lo que dicen de desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un mendigo. El estómago es como el segundo cerebro de nuestro organismo. El esfuerzo que tenga que hacer él durante la digestión nos repercute a nosotros en nuestro día a día.

Dieta de la alcachofa, dieta hipocalórica, proteica, disociada, macrobiótica Dukan!... blablabla Chorradas.

Hay que saber comer, y para ello no tienes por qué prescindir de tantas cosas, ni tomarte nada a mayores, ni dejar de comer hasta el desfallecimiento.

En mi caso, y como habréis leído previamente, soy alérgico al huevo y al kiwi. Este último no influye en mi día a día, pero el primero sí. Es una putada, hablando claro. Porque a quién no le apetece de vez en cuando un huevo frito, un revuelto, una tortilla... (aunque sea francesa).
Pues bien, te contaré que para la gente que padece DA (dermatitis atópica) tenemos y debemos controlar lo que ingerimos, ya que nuestro cuerpo reacciona más y lo que digiere lo refleja en la superficie: la piel.

Digamos que el binomio ensayo-error fue de mi mano durante varios años. Desde que empecé con el tema huevo hasta que, probando varias dietas, fui a mejor. Que si esto me sienta mal, que si lo otro me cae pesado... Me hago las pruebas de alergia y descarto ciertos alimentos. Aunque al tener disparada la IgE los resultados tampoco son muy de fiar: leche, harinas, arroz, soja, piña... etc.

La primera medida que tomé fue dejar de beber leche. Empecé con la de soja, que era lo más "normal" que empezaba a haber por los supermercados por aquel entonces. Sabe a rayos. Luego me pasé a la sin lactosa y pronto la descarté. No sé si fue que perdí el gusto a la leche, si me sabe agua con colorante o qué. Pero ya te dije hace unas entradas que la leche de hoy es de todo menos leche, por mucho anuncio que nos vendan por los ojos. Luego está la leyenda urbana del código en la parte inferior del tetrabrik que dice la cantidad de veces que ha sido pasteurizada o no sé qué. Toda una mutación, vaya. Finalmente, descubrí la bebida de avena. Riquísima. Te recomiendo que la pruebes, no pierdes nada (solo 1,20€).

Pollo y pavo. Carnes blancas que favorecen la digestión y que son poco grasas. Desde que empecé este nuevo tratamiento y que tan impactado te pudo haber dejado la entrada anterior, no he comido más carne de ave en toda mi vida.
A ver, digamos que con el nuevo tratamiento todo afecta. Es difícil de explicar.
Mi abanico alimenticio se resume en: carnes blancas, pescado blanco, verduras, patatas, pastas, arroz, fruta, café... seguro que se me queda algo en el tintero.
Parece que no puedo comer casi nada, pero no es verdad, contemplo varios alimentos que si los combino bien, dan para mucho.

Resulta que con el spray que me aplico, todo lo que resulte nocivo al cuerpo, lo rechaza y lo expulsa por la piel. Esto implica a picantes, chocolate, cítricos, cebolla, conservas como atún, sardinas, pescados grasos, carnes rojas, marisco, moluscos... del mar solo como pescado blanco, no más.
Digamos que todo lo que resulta pesado al estómago y a la digestión hacen mal. Y vaya si lo noto. En cuanto pruebo algo que se me escapa... ZAS! Venga picores y a expulsar ese liquidillo. Me pongo fatal. Sobre todo se nota al principio. Poco a poco lo irás tolerando, aunque con 6 meses todavía es preferible prescindir de todo esto.

Todo esto de la nutrición y la alimentación es un mundo que da para mucho y podríamos estar hablando y divagando sobre ello hasta las mil. No sé si te quedó claro lo que me va mejor y lo que no con la DA.

Después de casi una semana sin escribir creo que me he quedado a gusto con todo esto. Si me has echado de menos, aquí has tenido para rato jeje. Ahora espero no tardar mucho en volver a escribir, porque tengo muchas más cosas que contarte y que quizás puedas comentar y opinar. Cuanto más sepamos unos de otros, más fácil será llevar todo esto.

A empezar julio con buen pie.

Un saludo!

6/25/2014

EL PRINCIPIO DE UN LARGO CAMINO

Concienciación, motivación y constancia. Tres pilares que no han de faltar en este largo proceso.

14 de diciembre de 2013. Una fecha que queda marcada ya en mis días tras la que voy tachando semanas, quincenas y meses.
Este nuevo tratamiento tiene una duración aproximada de un año (los efecto se nota a partir del cuarto mes, aproximadamente). Un año en el que el cuerpo necesita limpiarse y regenerarse. También es verdad que todo influye según la persona. Quiero decir que, en función de cómo te hayas tratado y alimentado previamente, variará la rapidez y efectividad del mismo. Te recuerdo que en mi caso son ya 26 años de pautas de corticoides y demás drogas del sistema sanitario.

La base de este proceso está en el sistema linfático. ¿Sabes lo que es?
"Conjunto de capilares o conductos muy finos que se extienden por todo el cuerpo y que actúa en sincronía con el sistema circulatorio de retorno o venoso. El líquido linfático al circular arrastra sustancias atrapadas y limpia los tejidos. Distribuidos por toda la red de capilares linfáticos se encuentran los ganglios linfáticos." [www.enciclopediasalud.com]

La cuestión es que la gente con dermatitis atópica (también afecta a otro tipo de enfermedades) tenemos problemas para limpiar el organismo de esa carga que se nos genera en la zona hepático-biliar (hígado y riñones). Si a eso le sumas toda la carga medicinal que se acumula en esa zona... imagínate. Cada vez sería peor poder gestionar la enfermedad.
Estamos acostumbrados a tapar con cremas cada eccema en la superficie o a sobornar a nuestros órganos para que no actúen y, en realidad, eso es un aviso de que algo no funciona bien dentro.
Con esto que quiero decir? Pues que hay que ayudarse del sistema linfático para drenar todo lo innecesario y ayudar a nuestro cuerpo a regularse. Y ahora viene la sorpresa:

¿Qué hago para ello? Me aplico un spray en los pies.

Puede que te suene absurdo. Pero la planta del pie contiene el reflejo de todos nuestros órganos y, como base del sistema linfático, absorbe dicho spray y lo dirige por todo el cuerpo.
Con esto, el cuerpo es ayudado a liberar la carga nociva y a expulsarla poco a poco a través de los ganglios. Estos, que están agrupados en zonas como el cuello, las axilas y las ingles; se hinchan y eliminan un líquido a través de los eccemas.
Es un proceso bastante latoso porque para realizarlo, necesitas expulsar todo por la piel. Brotar de arriba abajo como nunca antes lo hiciste.

Y eso es lo que me pasó a mí al principio. Broté de una manera exagerada dejando mi cuerpo en carne viva, prácticamente.

Los primeros 15 días no notaba nada. El picor de siempre. Ya sabes que mi cuello era inmóvil por aquel entonces y no lo movía. Los que me vieron en Navidad sabrán lo que digo. Y, exactamente, a los 22 días de aplicar cada noche el spray empezó todo.
A penas me movía, no dormía, no me podía ni duchar... una impotencia que ni te imaginas.
La primera zona en reaccionar fue el cuello. Lo tuve en carne viva durante casi mes y medio. Cómo explicar esa sensación? No sé, hay que vivirla.
No paraba de supurar y expulsar ese líquido que te comentaba un poco más arriba. Hasta las orejas se vieron afectadas.

Mucha gente antes que yo probó este tratamiento y pude ver en fotografías de los estudios realizados, cómo se llegaba a poner el cuerpo. Pero parecía casi imposible. Una vez que me vi como en aquellas imágenes, recé por completar el proceso.

Puede parecerte una locura o pensar que algo así no tiene sentido. Te diré que a los 3 meses, mi cuello estaba totalmente limpio y regenerado, así como las orejas. La piel de mi cara reflejaba (y refleja a día de hoy) salud e hidratación. La parte mala de esto es que va por fascículos y cada vez le toca a una parte del cuerpo. Ya lo irás viendo.

Por lo pronto, me gustaría agradecer a quien me precipitó a esto y a quien me cuidó (y cuida) cada día para poder llevarlo de la mejor manera posible: mi padre y mi madre. Es justo reconocerles este sacrificio.

Y a ti también te reconozco el sacrificio de esta lectura. Espero que esto no te quite el sueño. No obstante te dejo un regalo. Un vídeo que ilustra y define bastante bien este sistema de limpieza corporal, aunque su base sea el cáncer. Dime qué te parece:
http://bit.ly/1sF9RvY



6/24/2014

LUZ AL FINAL DEL TÚNEL?

Y no hay remedio, eh. Mira que llevamos recorrido médicos, medicuchos y otras profesiones. Pero nada. Es inútil.

- El otro día nos encontramos con Fulano y Mengana, que dicen que su hijo también tiene dermatitis atópica y llevan paseado en busca de soluciones como nosotros y nada. Y dijo que llevaban una temporada con un tratamiento alternativo y que le va muy bien. - Dijo mi padre o mi madre. Ya no recuerdo.
- Y qué tratamiento es ese?
- Uno de una señora que tiene unas cremas. No es un medicamento.
- Yo no quiero "meigalladas" de esas.
- Quien sabe. Hemos probado tanto que ya... qué más da. Por consultarlo...

Esto fue más o menos un diálogo entre mis padres y yo a finales del años 2013. Después de todas las aventuras que os he contado hasta este momento, mi cuerpo no daba más de sí. Estaba apagado, terso, no movía el cuello de lo seco que lo tenía, el insomnio se apoderaba de mis noches y mi vida era inercia pura y dura.

Finalmente, se decidió ir a comentar ese tratamiento con la persona que lo lleva. Fue todo un poco raro, pero lo que explicaba tenía sentido.

No sé por qué ni por qué no, pero después de salir de allí con una llorera impresionante viendo que no tenía ya alternativas a un problema crónico, decidí empezarlo.
Uno nunca arriesga de esa manera hasta que no ve la desesperación tocando a la puerta. Cuando ya no tienes nada, te agarras al primer rayo de esperanza que ves.

Y ahí empezó todo. Un mínimo halo de luz que asomaba al final de un túnel muy largo.
Aquí empieza mi nuevo tratamiento.
Aquí empieza mi nueva vida.
Aquí empieza el por qué de este blog.

Ahora iré poco a poco comentándote cómo ha ido resultando en mí esta decisión.

Gracias de nuevo por pararte a leerme.

Feliz comienzo de verano.

6/22/2014

ESTRÉS Y ESTADOS DE ÁNIMO

Tranquil@, ante todo mantén la calma.

Tengo tendencia a cierto nerviosismo e inquietud ante la vida. Eso no es malo, siempre está bien tener ganas de más y estar motivado. Pero la impaciencia roza el estrés y a veces es peor.

Ya puedo no tener nada que hacer, que en mi interior hay algo que no está cómodo con la calma abusoluta. Y no me refiero a que sea hiperactivo, que "non teño paraxe". No. No soy de esas personas inquietas, simplemente el saber que hay algo que hacer y no estoy haciendo, el querer algo y ver que no lo consigo... ciertas puntualidades que hacen mella en el sistema nervioso y, seguidamente, actúan en la dermis.

Hace poco me comentaba una madre que su hijo (también con dermatitis) estaba peor de lo normal, pues estaba de exámenes y era incapaz de descansar su picazón. Yo le dije que no se preocuparan, que eso (al menos en mí) fue normal de siempre. Cada año escolar terminaba con sus exámenes de junio y mi piel creo que ya lo tenía asumido. A rascarse se ha dicho. Pero ya en la universidad se me llegó a complicar el tema con tanto estrés que mi espalda se llegó a quedar a dos colores. Obra abstracta digna del MOMA. Y es que incontroladamente llegas a desarrollar una flexibilidad en los brazos para llegar a rascarte allí donde no llegas que es increíble.

Total, que para combatir el cuadro abstracto utilicé un solarium. Se me había recomendado en dermatología acudir a sesiones de Fototerapia. Pero para ello suponía desplazarme más de 80km cada día. No cundía. Por lo que se me dijo que no era lo mismo, pero que el solarium, usado en pequeñas dosis, podía suplir ese sistema. Probé y efectivamente dio sus resultados. Además de irse gran parte de los eccemas, acabé moreno. Dos por uno.

Pues bien, como ya te comenté, cada año era lo mismo. Pero cada vez atacaba en un lugar diferente. No sé si el cuerpo tienen memoria y para no lastimarse de más, te ordena rascar en otro sitio. Pero así fue, un año la espalda, otro año las piernas, luego la barriga... y así sucesivamente.

Como ves el estado de ánimo influye. Hay que aprender a vivir con calma, y eso es muy difícil. Aunque también va en el carácter. Suertudos aquellos que viven tranquilos!

Después de todas esas aventuras que te he ido contando en posts anteriores, y pasado el momento naturista, he de contarte mi nueva historia: fisioterapia, osteopatía y... REIKI?
Digamos que de tanto aconsejarme en casa de que fuera a un fisio a por unos masajes que me relajasen, decidí acudir a uno en Coruña del que teníamos referencias buenas. Pues bien, una vez me decidí, pedí cita y ¿cuál fue mi sorpresa?
De todo menos masajes.

Me hizo una entrevista previa para conocer antecedentes familiares con otras enfermedades y llegando a preguntar cosas privadas muy fuera de lugar. Sentimentalismos frustrados en padres, abuelos, tíos que puedan influir y arrastrar psicológicamente durante generaciones provocando en otros DA (dermatitis atópica). Constelaciones familiares. Búscalo y me cuentas.
Parece ser que todo se queda en el alma y se "hereda" cual frustración y genera otro tipo de reacciones. En mi caso se llegó a deducir que dos suicidios en la generación de mis abuelos, y dos abortos en la generación de mis padres podrían ser los causantes de dos DA en mi generación (que las hay). Menos mal que sigo vivo...

Y dicho esto y tras un par de sesiones de NO masajes, llegó un momento en el que me pidió que cerrara los ojos e imaginara ciertas escenas. Yo, que soy curioso de más, los abrí y veo al profesional cabeza levantada y brazos estirados sobre mí cual meiga. Y tras ello, me recomiedo las FLORES DE BACH. En mi vida había oído hablar de eso. Pues son unas esencias de flores que dosificas en un cuentagotas cada día. Y en función del estado de ánimo tomas unas u otras.

Dejé de acudir a estas sesiones, pero seguí tomando las flores. Más tarde acabé por darme cuenta de que me estaba deprimiendo. Yo, que soy de poco llorar, tenía cierta tendencia a la lágrima mucho más a menudo y todo me ponía triste. Digamos que necesitaba expulsar toda esa "rabia y pena" contenida durante tiempo. Pero una cosa es desahogarse y, otra muy distinta, sumirse en una depresión. Así que dejé todo. A mí que me den las flores para sonreír, que para llorar ya está la realidad jajaja.

Con todo esto quiero decir que hay que estar a gusto con uno mismo. Que los estados de ánimo influyen y repercuten en tu piel. Tristeza, estrés, agobio, depresión... no las dejes entrar, que acabarás peor. Tu fortaleza y positivismo palian mejor la enfermedad y su mejoría.

A sonreír.

Gracias por leerme.

6/16/2014

NUTRICIÓN: UNA CARRERA PARALELA

Qué tal? Preparado para seguir con estas batallas? Continuamos con una semana más de un junio soleado y a esperas del san Juan. Qué ganas.

Justo por estas fechas (quizás más hacia adelante en el verano) hace un año en el que tomé una decisión: Dejar parcialmente de lado la medicina convencional. Decidí ir a un naturista. Sí sí, como lo oyes. No sé si conoces algo sobre esto. Sobre la homeopatía (yo ahí ya no creo tanto) y sobre la limpieza del organismo. Una serie de historias que he ido leyendo, oyendo y viendo a lo largo de muchos meses y que, según el individuo, unas funcionan y otras no.

Pues bien, la persona que me atendió en esta consulta naturista se centró en una dieta especial para reducir la dermatitis. Esto quiere decir que, según el alimento que ingieras, el organismo responde de una manera u otra. Parece ser que el intestino es como nuestro segundo cerebro y, lo que por él transite es vital para el funcionamiento del cuerpo.
Salieron de mi vida la mayoría de los lácteos (por no decir todos, aunque algún yogur apetecía). Aquí he de decir que (y esto es cosa mía) la leche no la debiera de beber nadie. Es curioso que seamos el único mamífero que la toma en edad adulta y de otro animal. ES ANTINATURAL y últimamente se desarrollan cada vez más intolerancias y alergias. Pero el kit de la cuestión es que la leche que compramos es... de todo menos leche. Ahí queda mi apreciación.

El trigo, que parece ser que es el peor de los cereales que el ser humano puede ingerir (hincha un montón y cuesta digerirlo), queda fuera y es reemplazado por CENTENO y ESPELTA. Hasta ahora no había oído hablar de este último y, como toda dieta, cuesta el doble que un pan normal. Es un poco mas dulce pero tiene buen sabor.
Aquí os dejo un vídeo para que veáis lo fácil de hacer que es:   http://bit.ly/1qlqkmP

El siguiente alimento "prohibido" fue la carne roja. Normalmente son pesadas de digerir y parece ser (según me explicaban) los restos se acumulan en el intestino delgado impidiendo que este complete bien su función. La carne de cerdo suele tener muchas toxinas y tampoco es recomendable abusar de ella, pero sí está permitida.
Al final la cuestión es subsistir a base de carnes blancas: pollo y pavo.

Hay que tener en cuenta que para favorecer la alimentación hay que beber mucha agua (2 litros/día mínimo) e intentar no combinar hidratos con proteínas que, si lo piensas bien, no puedes comerte un simple filete con patatas. Mucha verdura, mucho arroz y combinaciones poco habituales en mi anterior dieta. Un caos culinario.
Finalmente, de lo que me ha valido ha sido para un adelgazamiento casi exprés. La dermatitis no se fue. He de decir que tenía que tomar ciertos complementos de Omega3 e infusiones complementarias para ello, pero al final, me seguía picando todo y los eccemas persistían en el tiempo. Solución: Corticoides temporales.

De todo esto, lo que me llevo (y más adelante lo veréis), es una licenciatura en nutrición y alimentación a base de probar y probar.
Si te has visto en situaciones parecidas o sabes de alguien que lo haya padecido, no dudes en comentarlo. Entre todos salimos!

Gracias por tu tiempo.

6/12/2014

DOPAJE E INFLAMACIÓN

Continúan las peripecias atópicas, esta vez en la capital gallega: Santiago de Compostela.

Cansados de buscar remedios y especialistas en la materia, un familiar nos dio la referencia de un buen dermatólogo de renombre a nivel nacional que consulta en esta ciudad. Casi como decir el dermatólogo de los dermatólogos.
Pues bien, tras conseguir una cita acudimos a él y después de una larga consulta (en la sala de espera desde las 20.00 horas hasta las 01.30 horas) llegamos a la conclusión de que había que tomar corticoides a largo plazo, disminuyendo poco a poco, mes a mes, la dosis. ¿De verdad que no existe otro tipo de medicación o remedio?

Recordemos que yo por aquel entonces estaba en Valencia (por eso de ubicarte en mi historia). No sé si por corticoidarme o por el buen tiempo que allí empezó a llegar a partir de marzo comencé a ponerme bueno. No obstante, hubo que mantener un cuarto de pastilla diario durante casi medio año. La dicha duró todo el semestre y tras finalizar el curso, de vuelta definitiva a Galicia, de nuevo en su consulta revisamos mi piel. De esta vez su diagnóstico giraba en torno a los inmunosupresores (Sandimmun Neoral) pero dio marcha atrás al explicarle que hacía dos años lo había probado y no había dado resultado. Y menos mal, porque es una lata tener que estar cada semana haciendo análisis y tomando la tensión para comprobar las constantes renales y hepáticas (riñones e hígado, por si acaso).
Por todo ello, finalmente dicidio darme unas inyecciones de Trigón. me sorprendió bastante, porque n o hubiera imaginado que la dermatitis estuviera remitiendo así de bien con unas inyecciones. Pero bueno, poco me duró la alegría cuando, al tercer pinchazo (alternando en cada nalga mensualmente) empecé a notar molestias en la pierna izquierda. Tal fue el dolor que un día al despertarme era incapaz de moverla.
Todo esto derivó en una historia dolorosísima desde que la infección salió a la superficie y tuve que acudir a urgencias a que me abriesen y drenasen la pierna, hasta que después de tres meses de curas con una mecha (ni te imaginas lo que duele) la herida fue cerrando hasta que cicatrizó en la superficie.

Una nueva mala experiencia con las agujas. No sé si tú has tenido alguna situación parecida, pero te aseguro que no me han quedado ganas de ello ni de nada similar.

6/10/2014

CLIMA, AGUJAS Y SUPURACIÓN

Un dato curioso es que toda esta aventura tópico-alérgica que te estoy contando se da en un clima atlántico. Porque también hay que tener en cuenta la climatología, un factor muy importante del que he ido poco a poco percatándome de lo que me puede llegar a afectar la humedad y el cambio de tiempo (sobre todo cuando va a llover, cual viejo con su reúma).
Todo este tiempo he vivido en As Pontes (desde que nací hasta los 18) y en Lugo, donde empecé mis estudios. La siguiente etapa fue en A Coruña, por lo que pensé que el clima al tener el mar al lado, ayudaría a estar mejor, pues son muchos los veranos al sol bañándome en el mar y viendo mi piel secar y mejorar. Era increíble lo bien que me encontraba en los meses estivales. Por ello, al mudarme a la ciudad herculina piensas que puede ser un buen cambio. Iluso de mí. No sé por qué, pero ese año empecé a notar peor la piel, más irritable y roja. Sigues aplicando cremas y tomando todo tipo de pastillas para combatirlo, pero no hace nada.

Y llegó la primera medida alternativa a la medicina que todos conocemos: la acupuntura. Oyes que a gente le ha hecho maravillas: dejan de fumar, aparcan sus migrañas, las articulaciones van a mejor... Pues la dermatitis sigue en su sitio. No se va. Y es más, al día siguiente amanecí con un brote general con el que apenas me movía. Acto seguido acudí al centro de salud a por una inyección de urbasón y, no contento con ello, repetí la experiencia "por si acaso". Maldita la hora.

Poco después llegó el verano y pasé una temporada en un pueblo ourensano donde el clima dista bastante del coruñés. El clima continental se caracteriza por ser más seco y el calor que tiene en verano hace maravillas. Hacía tiempo que no estaba así de bien. Después de este cambio de ubicación fui a estudiar a Valencia, donde también piensas: ¿Clima mediterráneo? Seguro que allí estaré genial". Y de nuevo te das de bruces con la realidad. La elevada humedad de la comarca de La Safor no hizo nada bueno en mi delicada piel. Por lo menos en la temporada de invierno. Fue en ese mes de diciembre, justo antes de Navidad, cuando empecé a sufrir un extraño comportamiento en mi cuello. Sin saber por qué, la piel de esa zona se irritaba fácilmente y empezaba a supurar. Gracias a que ya me volvía a Galicia pude ir al dermatólogo y dejar que comprobara eso, porque si llega a ser por el sistema sanitario valenciano ya me podían encontrar tirado en la puerta del centro de salud que nadie me atendería. Sistemas de gestión autonómicos... pero bueno, ese no es el tema de este blog.
Una vez de vuelta en A Coruña esa reacción del cuello me sorprendió de madrugada supurando de una manera descomunal, llegando a encartonar el cuello del pijama de la cantidad de líquido que echó. Y así, de madrugada y en pijama, arranqué el coche en dirección Ferrol y que vieran mi estado. Esperé primero en urgencias donde me pusieron urbasón en vena y, horas más tarde, me atendió el dermatólogo. Una vez más no hay más remedio que pautar corticoides.

6/08/2014

LAS PRUEBAS

Hola de nuevo.

Como ya os he comentado en el post anterior, mi cuerpo es un misterio que esconde un sinfín de rarezas que a día de hoy son difíciles de explicar para la medicina que todos conocemos actualmente.

Seguimos donde lo habíamos dejado. Mis alergias.

Volviendo un poco la vista atrás (casi 10 años), cabe mencionar un dato curioso, casi anecdótico. A la edad de 11 años, aproximadamente, en una boda y tras probar el postre empiezo a encontrarme mal. Los labios hinchan y me falta el aire. Finalmente, al vomitar, se me pasa todo. Mientras mi madre achacaba ese malestar a mi nerviosismo por ser la boda de quien era, otros familiares sorteaban en el menú los alimentos por si alguno me había hecho reacción. Pero no había nada fuera de lo normal. Lo típico: marisco, pescado, carne y tarta. Cualquier ingrediente fue hasta el momento comido sin problema alguno. Lo primero que piensas es en el marisco, por el hecho de haber mucha gente con esa alergia (más adelante comentaré sobre este alimento). Pero resultaba raro que el primer plato me hiciera reacción a las 3 horas. Después de pensar y pensar, una prima comentó que un amigo suyo era alérgico al kiwi, pero parecía casi imposible que después de haber comido esa fruta toda la vida. Pues efectivamente, un helado de kiwi.
Tras llevar este inofensivo y peludo fruto a Alergias y hacerme las pruebas, se confirmaron las sospechas: ALÉRGICO! Se apresuraron a decirme que tuviese mucho cuidado, ya que la alergia era tal que podría provocarme la muerte. "Menos mal que es un alimento poco frecuente en mi día a día" pensé. (No se consuela el que no quiere).

A partir de ahí poco más pasó en ese aspecto (sin olvidarnos de la dermatitis). Pero volvamos a situarnos donde lo dejamos en el post anterior, en los pasillos de Alergología ferrolanos.

Numerosas pruebas alérgicas y análisis de sangre para medir la IgE (inmunoglobulina encargada de tolerar alimentos, por así decirlo). Esta suele situarse en unos valores entre 400 y 500, según me explica la doctora a la cual respeto y admiro por cómo ha tratado el tema conmigo. Casualmente en mis análisis el baremo pasa de los 5000 puntos, lo que hace que se disparen en las pruebas alimentos como la leche, el cacahuete, la piña (por cercanía al kiwi), el trigo o el arroz, aunque yo no note nada al comerlos. (No obstante, estos datos se contradecían en varios análisis).

A pesar de intentar evitar esas comidas, y analítica tras analítica, los datos se disparan hasta superar los 9000 puntos de IgE. Ni que fuese una bomba de relojería a punto de reventar.

Esto que comento y resumo en un par de párrafos supuso al menos 4 años de ensayo-error con mi estómago. Un calvario. Pero después de todo, comentaré más adelante la importancia de la alimentación indistintamente de lo alérgico que pueda ser un alimento.

Espero que hayáis tenido un buen fin de semana. Gracias por leer esto y, a empezar con ganas el lunes.

6/04/2014

NUEVA ETAPA: ALERGOLOGÍA

Hola de nuevo. Ya le voy cogiendo el gustillo a esto de escribir un blog.
Seguimos relatando mis aventuras dermatíticas una vez superada la fuerza divina.

Como ya comenté en una entrada previa, hubo quien arriesgó a vaticinar que esto acabaría en mi adolescencia. Ya sabemos todos que no. Pero no contento con asumirlo, a la edad de 21 años empiezo a tolerar mal ciertos alimentos. Pensando desde un principio que era una simple gastroenteritis y de comer pollo cocido y arroz blanco a diario, veo que no me se cura, NO DESAPARECE! Y es que cada vez que comía un plato de tortilla francesa o un simple filete rebozado recaía: Intolerancia al huevo. Lo que me faltaba. Y todo esto tras atar cabos de ver lo que comía, pese a la tendencia de algunos a decir que era todo psicológico. Acudo al médico y ahí empieza una nueva etapa en mi vida: el pasillo de alergología.

En este punto las fechas y edades no las tengo muy claras. Pues con pocos años (pongámosle unos 10 u 11 años) te haces las pruebas de la alergia y te da reacción lo típico: ácaros, gramíneas y pelo de gato. Lo único destacable es que a los pocos años la alergia al polvo se disparó y me dieron la opción de vacunarme todos los meses durante cinco años con AlergoVac Depot. Da pereza solo de pensarlo, pero realmente mereció la pena, pues hoy no estornudo a penas.

Como veis, da para escribir un libro sobre esto. A algún dermatólogo y/o alergólogo le vendría bien situarse en el otro lado. Aquí os dejo por hoy. Para mañana continúo con más alergias.

6/02/2014

CURACIÓN DIVINA

También es cierto que el estrés y el nerviosismo pasan factura. Una vía para solventarlos son las técnicas de relajación. Más de uno habréis hecho como yo y habréis acudido en momentos puntuales a daros unos masajes. Se recomienda el yoga, tai-chi y diversas doctrinas orientales por las que no he optado hasta hoy. No obstante, y a pesar de salir satisfecho de esas friegas, ha sido todo en vano.

Buscas y rebuscas métodos y soluciones porque ALGO TIENE QUE HABER. Si hemos sido capaces de llegar a la Luna, ¿por qué no poder curar una dermatitis? Es tal la desesperación que recurres a métodos altamente dudosos para quien no cree (entre los que me incluyo). Bendecir la piel por parte de una señora que poco más que tu abuela sabrá y que se cuelga la medalla de "curandera" es el siguiente paso.
Recitaba unos versos de los que todavía a día de hoy recuerdo (y ya van más de veinte años de esto):
Nuestro Señor, san Pedro y san Pablo,
Montes y valles vieron arder.
Dijo san Pedro: ¿qué es aquello Señor=
“Es el eccema carnal”

Historias para no dormir, vaya. Y tras decir alguna frase más, escupía sin pudor en mis heridas. Es sabido que la saliva es un antiséptico natural y que cicatriza pero... También es cierto que ante la desesperación te agarras a un clavo ardiendo, pero sinceramente, creo que este tipo de acciones son para reírse de la gente. Allá cada uno.

¿Tú qué opinas? ¿Has acudido a algún remedio similar?



Stress and nervous can make you feel really bad, as well. One way to solve them are the techniques called as "relaxing". Most of you, as me, went in some moments to received some massage therapy. It is recommend practicing yoga, tai-chi and several oriental disciplines which I never tried till now. However, and besides felt so relaxed after that, it was not working to me.

You can look and re-look for methods and solutions because... SOMETHING MUST BE. If we were able to arrive to the moon, why there is no way to solve a dermatitis? You can get so desperate that finally you choose some kind of high level doubted methods for people who don't believe (I am one of them). Blessing your skin by one old lady who more or less can know the same as your grandmother, is putting on herself the medal of "medicine-lady". This is the next step. She was saying some kind of rime that I can even remember now (more than twenty years):




Stories for no sleeping, let's say. After finishing with some other sentence, she spat on me, in my wounds. It is known that saliva can recover and heal you wounds because is like an antiseptic but... When you are desperate you can even grasp at straws, but to be honest, I think this kind of actions were invented to laugh about people. It is up to you.

What do you think? Did you take any similar treatment?